Queremos agradecer también, y muy especialmente, a esa encantadora minoría que conforman aquellas extraordinarias personas que nos regalaron con tanto esmero, con tanta dedicación, su más absoluta indiferencia. Somos devot@s de la resiliencia, lo hemos dicho, y cada uno de esos silencios (algunos tan amorosamente calculados) nos ha hecho elevar la apuesta, postear más seguido, esforzarnos cada día un poco más, hacernos cada vez más conocid@s, vender más libros, posicionarnos con firmeza en el mundo editorial y en un lapso muy breve de tiempo. Entendemos perfectamente que las reglas impuestas de cierta posmodernidad son un tanto… ¿cómo decirlo sin herir susceptibilidades tan enquistadas, intentando transmitir todo lo contrario?...son un tanto… ¿cómodas? Vivimos en un mundo en donde se sigue premiando el esfuerzo, claro, pero también transitamos el devenir de una época en donde tanta gente tiene la creencia (considerable) que cambiar una foto en el perfil de wasap o publicar en las redes lo que está almorzando es tanto o más meritorio que escribir un libro o un muy buen texto. Gente entrañable, tan querida, que tiene la creencia que hacerse una selfie (con flash) frente al espejo del baño es más loable que pintar un gran cuadro o hacer una ilustración excelsa.
La difusión de cada posteo de este gran blog se ha hecho exclusivamente por wasap, nos resultó muy atractiva y novedosa esa vía de intercambio, la hemos hecho desde la editorial y han colaborado en la transmisión de nuestros mensajes un montón de amig@s, que luego extendieron su participación en otras redes sociales. Hay publicaciones de autores consagrad@s, emergentes e inédit@s con cientos y cientos de lecturas, el registro interno de este espacio virtual así lo señala. Nos sorprende y alegra. Y volvemos a agradecerlo. Dicho todo esto, nos vemos, pues, a la vuelta de la esquina, que queda en el 2021. Iremos publicando, nuevamente, buen contenido y diseño cuando amerite y nuestras otras múltiples ocupaciones nos dejen el tiempo y el espacio necesario para hacerlo. Confiamos que el que viene será un Gran Año. Gracias por leernos, por acompañarnos, por estar.