Aún no amaneció mientras se
escriben estas líneas. Hace mucho frío. Se siente en el aire, el del clima y el
de la incertidumbre, aunque es menester añadir que esta situación epistémica también suele ser fruto de encendidas pasiones. Prácticamente toda la Humanidad permanece en vilo,
esperando a que sus gobernantes decidan qué hacer con el devenir de miles de
millones de individuos que desean retomar sus vidas, su cotidianidad. Mientras
esto sucede, la única buena noticia concreta es que La Naturaleza descansa de
nosotr@s. En medio de esta pandemia (que la mayor parte del mundo acepta y acata
tal como le dicen que es, en tanto una pequeñísima y muy atendible porción de gente, ya se ha dicho aquí mismo, la pone en duda,
al menos en su magnitud) un puñado de entusiastas y utópicos decide abrir una
editorial independiente con títulos en donde predomina el quehacer poético. No
tenemos registro de que se haya llevado a cabo tan minúsculo y tan gran
acontecimiento en otro rincón de La Tierra. Si nos equivocamos al respecto, lo
cual es muy probable, si hay otra editorial sin recursos que haya abierto
mientras, literalmente, las puertas y ventanas, las rutas y fronteras del
planeta se cerraban, le damos la bienvenida, es muy grato sentirse acompañad@s
en estas faenas. Y si somos la única editorial , pues eso, lo festejamos con discreción en medio de este
murmullo sereno pero tan potente entre toda su civilizada, dolida y expectante paciencia.
Hoy inauguramos esta nueva sección, en donde
les brindaremos fragmentos recientemente escritos por destacad@s y muy
talentos@s autores y autoras que forman parte de nuestra familia, plumas que
vuelan y que tienen mucho que decir acerca de este Monotema que nos atraviesa.